Conviértete en un jedi de andar por casa con estos simples consejos.
Internet está repleto de consejos de psicología y lenguaje corporal hechos por aficionados, desde absurdeces sobre auto-ayuda hasta hipnoterapia para principiantes disfrazada de consejos para logar citas. Todo eso, si aceptas un buen consejo, es material que puedes (y debes) ignorar.
Al mismo tiempo, también hay algunas verdades psicológicas y sociológicas básicas que no solo tienen sentido sino que, al escucharlas, son tan obvias que ya las sabías desde hace ya bastante tiempo.
Esta es una lista de ellas: observaciones en las que hemos aprendido a confiar a lo largo de los años que deberían ayudarte a trabajar, descansar y actuar con más confianza.
1 | Si quieres que alguien exprese que está de acuerdo con lo que tú estás diciendo, asiente y mantén contacto visual mientras le hablas. Su cerebro leerá tu cabeceo como que estáis de acuerdo y lo normal es que, por convención social, asienta también. Tampoco lo exageres si no quieres parecer un loco.
2 | Si quieres causar un impacto positivo cuando des un apretón de manos a alguien, asegúrate de que no las tienes frías. Está probado que unas manos a temperatura agradable dejan una buena sensación en la otra persona. Lo sentimos, Iceman.
3 | Durante una presentación, toma nota del color de ojos de alguien. No vas a usar esa información (a menos que tengas la intención de escribir un poema): es solo una técnica para lograr la cantidad óptima de contacto visual, algo que las personas consideran algo amistoso y que denota seguridad en ti mismo.
4 | La gente siempre tiene el recuerdo más claro de lo primero y lo último que sucede, mientras que lo que sucede entre medias se convierte en algo más vago y borroso. Entonces, si estás concretando la cita para una entrevista, intenta ser el primero o el último en cruzar la puerta.
5 | Los pies de las personas a menudo dan una idea de lo que están pensando. Por ejemplo, si te acercas a dos personas que hablan y giran su torso hacia ti, pero no sus pies, prefieren que las dejes en paz. Del mismo modo, si estás hablando con alguien y sus pies están apuntando lejos de ti, quieren huir.
6 | Cuando estalla la risa en un grupo de personas, cada una de ellas mirará instintivamente al individuo del grupo con el que se sienta más cercano. Esta es una buena manera de descubrir quién está teniendo una aventura en secreto en el trabajo.
7 | Como todos los terapeutas que valen la pena, recuerda usar el poder del silencio. Si alguien te da una respuesta insatisfactoria a una pregunta, mantente en silencio y mantén el contacto visual. Por lo general, se sentirá presionado para seguir hablando y revelar más.
8 | Si sabes que un grupo te atacará en una reunión, siéntate junto a ellos deliberadamente. La proximidad y el efecto espejo de vuestros cuerpos les hará sentir menos cómodos para ser agresivos, y a ti te resultará más fácil hacerlo.
9 | Pedirle a la gente pequeños favores entrena a sus cerebro para creer que les agradas.
10 | Por difícil que sea, si puedes adquirir el hábito de recordar no solo el nombre de una persona cuando la conoces por primera vez, sino de usarlo en la conversación posterior, le parecerá tremendamente encantador y maravilloso.
11 | Reflejar el lenguaje corporal de las personas cuando interactúas con ellas es una forma de aumentar la confianza. Solo tienes que ser sutil al hacerlo.
12 | Al caminar entre una multitud, mantén la mirada en los espacios libres entre las personas en lugar de en las personas mismas. Por lo general, se apartarán de alguna manera para dejarte pasar.
13 | Una cita que implique adrenalina – montañas rusas, películas de terror…– ayudará a simular excitación en el cerebro y hará que las personas piensen que están disfrutando de tu compañía. Con suerte, lo harán en todas las situaciones a parte esas.
14 | La mejor forma de aprender es enseñar. Si estás aprendiendo a hacer algo, ya sea una habilidad o un conocimiento, intenta que alguien más se interese por ello a la primera oportunidad que tengas.
15 | Finalmente: no hay nada que le importe más a la gente que su propia imagen. Descubre cómo le gusta pensar a la gente de sí mismos, y utilízalo a tu favor. Y por cierto, hazlo de manera responsable (este último consejo y todos los demás).
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