Unos azotes
(1/10)
Pocas cosas resultan tan excitantes como un azote en las nalgas en el momento adecuado. Se lo puede dar él a ella o ella a él con similares resultados. Para mayor morbo se puede utilizar alguna fusta especial que podéis encontrar en tiendas eróticas. Es algo inofensivo, no requiere mucha preparación y os encantará.
Masturbarte delante de tu pareja
(2/10)
Todos tenemos ese punto de voyeurismo que hace que disfrutemos observando la intimidad de otros, seguro que te resultaría muy excitante ver a tu pareja masturbándose. Además si te fijas bien es muy probable que adquieras nuevas técnicas para cuando sea tu turno. Eso sí, no seas egoísta y deja a tu chico-a observarte también.
Sexo anal
(3/10)
El sexo anal puede ser muy placentero y nada doloroso si se hace bien. Es imprescindible una buena cantidad de lubricante y paciencia para dilatar la zona poco a poco. Es mejor comenzar con los dedos antes de intentar con algo más grande. Esta práctica puede ir en ambos sentidos, existen arneses con dildos para que el hombre también sea penetrado. ¿Os atrevéis?
Jugar a los disfraces
(4/10)
Haced un pequeño role playing aprovechando alguna fantasía erótica. La enfermera y el paciente, el profesor y la alumna…Haceros con unos buenos disfraces y meteros totalmente en el papel. Al principio os sentiréis ridículos y probablemente echéis unas risas (que nunca vienen mal) pero seguro que después ese disfraz saldrá varias veces del armario.
Hacer un striptease
(5/10)
Pocas cosas hay más sexys que un striptease. Cuida el vestuario (aunque te lo vayas a quitar), elige la música y busca una coreografía sensual en internet. Ensaya antes con el espejo y elimina tu vergüenza. No te preocupes, en cuanto te vea lo último que importará será el ritmo que lleves. ¡Incluso puedes dar un paso más y apuntarte a clases de “pole dancing”!
Hacer un trío
(6/10)
Hombres y mujeres fantasean con meter a uno más en la cama. Si no te quieres quedar solo en la fantasía propón a tu pareja llevarlo a la realidad. Este tema puede ser delicado y hay que tratarlo con cuidado, si os decidís nunca lo hagáis con alguien emocionalmente cercano a la pareja (amigos, etc.) y poneros de acuerdo acerca de los límites.
Comer en el cuerpo de tu pareja
(7/10)
Existen restaurantes en los que puedes comer en el cuerpo desnudo de un/a modelo. ¿Quieres probar algo parecido?, puedes empezar con cosas pequeñas como chucherías o algo como nata o miel. Si os animáis hasta podéis llegar a consumir un menú completo en el cuerpo desnudo del otro. Sushi es una buena opción…
Bondage
(8/10)
O una versión casera que básicamente consista en que uno ate al otro a la cama (o donde quiera). Podéis utilizar esposas pero también bufandas, cinturones o cintas. Esa posición de dominación y sumisión puede ser muy erótica y si además le sumáis una venda para los ojos se multiplicarán las sensaciones en el resto de los sentidos.
Rodar una película erótica
(9/10)
No hace falta que tenga guión, ni siquiera que hagáis posturas dignas del circo del sol, simplemente grabaros haciendo el amor como os guste a vosotros. Podéis colocar una cámara en un trípode o ir turnándola para sujetarla cada uno, así podréis ver la perspectiva del otro. Aunque luego no os apetezca verla, solo con rodarla ya será una experiencia lo bastante excitante.
Tener sexo en un lugar público
(10/10)
En los probadores de un centro comercial, en los baños de un cine, en la playa…hay mil lugares donde se puede tener sexo con el añadido del morbo de que os pillen. ¿Te atreves? Si os da un poco de corte podéis empezar haciéndolo en vuestra propia casa pero en lugares en los que podríais ser observados…como el jardín.
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