¿Te imaginas una película porno sin sexo? Sasha Grey nos muestra cómo quedan entonces sus brillantes argumentos.
El bicho raro del porno y una de las figuras más importantes de la década que luchó por dignificar su profesión y su imagen. Con una mente caótica pero inquieta, se graduó del instituto un año antes de lo normal y después de estudiar un poco de cine, danza e interpretación, a los 18 se mudó a Los Angeles con la idea fija de ser actriz porno.
Eligió su nombre artístico por Sascha Konietzko, de la banda de rock industrial KMFDM, y por El retrato de Dorian Gray, la novela vampírica de Oscar Wilde, y se presentó en su primer rodaje, nada menos que una orgía comandada por Rocco Siffredi y el director John Stagliano, donde le pidió al astro italiano que la golpeara en el estómago. Quizá fue esa extraña petición lo que sirvió de detonante o quizá simplemente tenía que ocurrir, pero a partir de entoces su eclosión fue desproporcionada, una trayectoria fulgurante como ninguna, tanto que seis meses después los críticos ya la tildaban como la nueva Jenna Jameson. Rodó muchas escenas, ganó muchos premios e hizo de buen grado las marranadas más brutales imaginables, y quizá esa precocidad fue la que le impulsó a retirarse son solo 21 años.
Para entonces ya había trabajado con artistas como Terry Richardson, Steven Soderbergh, Frédéric Poincelet o David Choe, había sido portada de centenares de revistas como Rolling Stone o Penthouse, había colaborado en numerosos proyectos musicales, preparaba la publicación de su libro fotográfico Neu, había sido imagen de la PETA y de los derechos de los homosexuales y tenia una larga lista de cameos por hacer en el cine y la televisión. Y así fue como la más puta de todas se convirtió, ya no en la más señora de todas las putas, sino en todo un icono de la cultura pop.
¡Imperdible vídeo! (solo el lenguaje puede herir su sensibilidad)
No hay comentarios:
Publicar un comentario