Los hombres funcionamos diferente a las mujeres con respecto a nuestra activación sexual, ese es un principio básico para poder satisfacer a tu pareja. Por ello pensar que lo que nos excita a nosotros las excita también a ellas y en el mismo grado, es algo que te llevará al fracaso en una sesión amatoria. Y si hablamos del sexo oral, las cosas pueden resultar algo confusas. Obviamente que estimulen tu “zona candente” con la boca, es algo que le agrada tanto a hombres como a mujeres, pero con ellas, hay que saber cómo hacerlo. Aquí unos consejos útiles.
1. No esperes a que te lo pida
En su mayoría, las mujeres no te pedirán que lo hagas, en algunos casos les da vergüenza, o simplemente te lo están haciendo saber con su lenguaje corporal. Por eso, nos toca a nosotros sorprenderlas y hacerlas sentir cuánto las deseamos.
2. No hagas que sienta que es una obligación de tu parte
Si ella acaba de premiarte con una sesión de sexo oral, ni se te ocurra decirle “ahora es mi turno”. Sí metes la pata al decir eso, ella pensará que lo haces porque te sientes obligado, cuando lo que ella espera es que lo hagas porque es lo que más deseas hacer en ese momento.
Si ella acaba de premiarte con una sesión de sexo oral, ni se te ocurra decirle “ahora es mi turno”. Sí metes la pata al decir eso, ella pensará que lo haces porque te sientes obligado, cuando lo que ella espera es que lo hagas porque es lo que más deseas hacer en ese momento.
3. Tómate tu tiempo
Nosotros somos automáticos, nos tocan los genitales y ya estamos listos. Ellas no, si vas de frente a su vagina, la incomodas y se disipa la pasión. Tómate tu tiempo y comienza a recorrer su cuerpo con tu boca, lengua, manos y lo que se te ocurra. Ella te avisará con sus caderas cuando ya esté lista para que visites su jardín de las delicias.
Nosotros somos automáticos, nos tocan los genitales y ya estamos listos. Ellas no, si vas de frente a su vagina, la incomodas y se disipa la pasión. Tómate tu tiempo y comienza a recorrer su cuerpo con tu boca, lengua, manos y lo que se te ocurra. Ella te avisará con sus caderas cuando ya esté lista para que visites su jardín de las delicias.
4. El juego previo es importante
Como mencionábamos en el punto anterior, no hay que ir de frente al grano. La mujer contiene todo un campo minado en su cuerpo que debes saber detonar para que su clítoris esté lo suficientemente excitado para recibir tus atenciones. Conoce a tu pareja, y sus puntos sensibles, esa siempre será tu tarea.
Como mencionábamos en el punto anterior, no hay que ir de frente al grano. La mujer contiene todo un campo minado en su cuerpo que debes saber detonar para que su clítoris esté lo suficientemente excitado para recibir tus atenciones. Conoce a tu pareja, y sus puntos sensibles, esa siempre será tu tarea.
5. Pregunta solo si es necesario
A ninguna mujer le gusta que le preguntes durante el sexo ¿te gusta? ¿más duro? ¿soy lo máximo no? Si te responden es para que te calles. Pregunta solo si ves que no está cómoda. Lo mejor es observar: con un poco de intuición descubrirás sus gustos y sabrás cómo actuar. Mantén la lengua ocupada en otra cosa.
A ninguna mujer le gusta que le preguntes durante el sexo ¿te gusta? ¿más duro? ¿soy lo máximo no? Si te responden es para que te calles. Pregunta solo si ves que no está cómoda. Lo mejor es observar: con un poco de intuición descubrirás sus gustos y sabrás cómo actuar. Mantén la lengua ocupada en otra cosa.
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