Los drones son el presente, y dadas las dificultades que presenta su control, cada vez son más los mecanismos que se están explorando para poder anularlos, derribarlos o cualquier otra cosa que pueda evitar que se salten la ley. De los medios que he visto hasta ahora, pocos parecen tan eficaces como el de la policía holandesa, que está entrenando águilas para derribar drones.
Ya habíamos visto que la policía japonesa usaba drones para interceptar otros drones, pero lo cierto es que en comparación no hay color, y creo que faltará mucho para conseguir que los drones tengan la eficacia que demuestran estas aves. Además, hackear o tomar el control de un águila es imposible, mientras que el dron “interceptador” podría verse expuesto a problemas diversos y perder el control.
Otra ventaja de las águilas es su potencia y su facilidad para transportar a sus presas, evitando que los drones pudieran caer sobre alguien o algo causando lesiones o daños materiales.
El vídeo está en holandés, y quizá la principal duda es el peligro que pueda suponer para los propios animales (por ejemplo por las hélices), pero la policía holandesa afirma que están investigando todos los pros y los contras de este sistema mientras continúan entrenando a los animales, para dentro de unos meses tomar una decisión definitiva sobre si se puede generalizar este sistema.
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