Salir a fuego, quemar todos los bares y ver amanecer. Una sucesión de eventos que casi nunca termina con el romanticismo que pretendías. Has gritado, has cantado y has luchado con tus camaradas bajo la luz de la luna, pero súbitamente los focos se han encendido y la música se ha terminado, quedando la misión a medias.
Sí, tío, una vez más la noche ha muerto y el cabrón del sol se alza arrogante, obligándote a soltar los cubatas y demás enseres de guerra para poder cubrir el rostro con tus manos. Arden los vampiros y uno a uno se van rompiendo todos los hechizos; parece que a la doncella por la que luchabas en el último bar la luz no le ha sentado nada bien. Otras veces ni siquiera hay cenicientas de las seis de la mañana. Con todos los listones derribados, pensativo y cabizbajo inicias - como lo llamó en su día una vieja amiga - el walk of shame.
Bienvenido Mr. Domingo, día de reflexión.
¿Qué ha fallado?
Un lector me pasó hace más de un mes un texto con un título curioso: "la kinoescalada", quería mi opinión, alegando que nunca había hablado de ello en el blog. Tras hacer un repaso por la red veo que hay innumerables webs y artículos describiendo el concepto. Se podría decir que la kinoescalada es algo parecido a ir poniendo cachondas a las damas a base de tocarlas, "escalando" de menos a más por su sinuoso cuerpo. Lo que en Bilbao siempre hemos llamado hacer "el pulpo" o la "mano tonta". En general, todo lo que he leído ha sido bueno, ya fuera bueno para ligar o para recibir "hondonadas" de hostias, que dirían en airbag.
Pero lo cierto es que el concepto es interesante, saber tocar a una chica no es una tontería; de hecho, es una parte importante del cortejo, y por eso he decidido dar mi particular visión sobre el tema, no sin antes dejar unos apuntes clave.
Apunte número 1, al amanecer todo el pescado está vendido.
Radio bueno de acción: 12:30 a.m. - 3:30 a.m. No te engañes, a las 6 de la mañana (salvo días especiales como Nochevieja y poco más) no suelen quedar elfas, y si las hubiera - que no las hay - no están receptivas. Lo que queda es lo que nadie con un mínimo de decencia ha querido (99%) y lo que nadie ha podido tener (1%). Antes que seguir errando por los últimos desagües es preferible ir a casa, beber mucha agua y tratar de levantarse sin resaca el día siguiente.
Apunte número 2, salvo que seas Brad Pitt, no delates tus intenciones sexuales desde el principio.
Un error que muchos galanes cometen es masculinizar a las chicas, pensar que tienen las mismas pulsiones que nosotros. Como ya dije en cambia de escenario, las chicas se sienten atraídas un poco más despacio. Los primeros minutos hay que hablar con leve desinterés fingido, al menos en Euskadi.
Y ahora sí, procedamos con el concepto a tratar hoy.
La kinoescalada:
De alguna manera sabemos - ya sea porque lo hemos vivido en nuestras carnes o por mera observación - que cuando las cosas "están sucediendo" gladiadores y ninfas se toquetean. Esto lleva a muchos guerreros a asociar el hecho de "tocar" con "pillar". Si p -> q. Quiero "q" a saco, me pongo a hacer "p" a bloque. Pues no chavales, no es así exactamente como funciona.
Dejo aquí unas normas básicas basadas en mi propia experiencia personal.
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| Este tío es nivel experto |
1) No debes tocar a la ninfa sin haberle mirado antes a los ojos unas cuantas veces. Evita la nefasta sensación de estar tocándola sin venir a cuento. Este finde observé a un gladiador que dejaba la mano muerta en el hombro de todas las damas a las que se acercaba. Ni que decir tiene que lo único que pilló fueron cubatas (uno tras otro, por cierto).
2) Lo ideal es que la primera vez que entréis en contacto parezca un accidente. Lo mejor es hacerlo en un contexto de vacile: se la sueltas, esperas dos segundos serio y luego le sonríes y le das un abracito o le pasas la mano por la espalda, rollo pobrecita.
3) Los primeros contactos deben de ser breves. Lo suficientemente largos para que les resulten agradables, y lo suficientemente cortos para que cuando sus hormonitas de hembra noten que eso molaba, ya te hayas apartado. Es como una melodía que va in crescendo, las primeras notas deben ser suaves. Se trata de que sientan que quieren más de eso. Si hay que fijar un tiempo, diría que al principio más de un segundo y medio... malo.
4) Descarta rozar zonas donde puedan tener complejos, al menos hasta que la hayas besado un rato. Cada chica es un mundo, pero normalmente evita la tripa y el culo, aproxímate antes a los brazos, hombros y espalda (no necesariamente en este orden). Está claro que hay damiselas que te van a saco, pero con esas no hacen falta estos consejos.
5) Si el garito está lleno y os vais a desplazar, agárrala de la mano. Puede que esto te parezca moñas, puede que ni siquiera le hayas dado la mano a esa chica adorable con la que saliste tres años, pero si habéis estado hablando y sientes que la cosa puede fluir, no dejes de hacerlo, a ellas les gusta. Eso sí, suéltala unos metros antes de llegar al sitio donde te quieres parar. Recuerda, lo has hecho sin darte cuenta, ha sido algo "casual".
6) Si no la ves receptiva, no la toques. La kinoescalada es un fracaso total si se hace antes de tiempo. He leído varios artículos que dicen dos besitos - mano - espalda - atrás - atrás - adelante - beso - culo - teta, como si estuvieran haciendo un combo con la play. Pues no, hay tías que van más suave o que directamente no quieren nada. En estos últimos casos no insistas, es mucho más eficiente pasar cuanto antes a la siguiente.
7) Mucho cuidado con la kinoescalada delante de sus amigas. Los artículos que tratan el tema no hablan de ello, pero una complicidad excesiva con sus amigas al lado puede hacer que se sienta excesivamente observada, tanto como si estuvierais besándoos delante de ellas. Si ambos estáis cómodos y la cosa parece clara, pregúntale cuándo piensa invitarte a la caña que te debe. Si te dice que no te debe ninguna, le dices que lo discutís en la barra. Aíslala.
8) Por último, la kinoescalada es una manera de demostrar confianza en uno mismo. A las chicas les gusta tener la sensación de que sabes lo que haces. El descaro, sin ser baboso, demuestra que crees en ti y eso es lo que más curiosidad les va a suscitar al principio, el resto vendrá rodado.
No las acaricies de forma dubitativa (para eso es mejor esperar un poco más) y cuando las agarres hazlo siempre con firmeza, pero sin apretar.
De Cortejohumano.com
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